Es una carta que envió en 1855 el jefe indio Seattle de la tribu Suwamish al presidente de los Estados Unidos Franklin Pierce en respuesta a la oferta de compra de las tierras de los Suwamish en el noroeste de los Estados Unidos, lo que ahora es el Estado de Washinton.
Me encanta esta carta.
Si el hombre se incluyera en el planeta, en vez de excluirse de el y mirar todo desde un punto de superioridad, todo sería distinto (seguramente nos podríamos bañar en el Tajo). Menos mal que al final estos salvajes se civilizaron, si no yo no se que hubiera sido de America, lo mismo ahora seguiría igual, y no tendríamos en Mac Donals.
Cuando hayas cortado el último arbol, contaminado el último rio y pescado el último pez, te darás cuenta de que el dinero no se puede comer.
Me ha salido un poco la vena ambientalista,jijijiji
La primera vez que la lei se me pusieron los pelos de punta......enhorabuena por la elección.
ResponderEliminarHasta que no entendamos que el mundo no nos pertenece, sino que nosotros pertenecemos al mundo seguiremos en el camino equivocado.
ResponderEliminarLa visión exageradamente antropocéntrica que nuestra sociedad tiene es insostenible además de completamente estúpida.
Por cierto, he leído que varias tribus, con el dinero de los casinos y otros negocios como la cadena Hard Rock, están comprando las tierras en que vivían sus antepasados para restaurarlas dejando únicamente las especies animales y vegetales que había cuando ellos vivían allí, en armonía con la naturaleza. Si queréis leerlo os dejo la revista.